Organizar el cuarto para la llegada del bebé

Cuando vas a ser madre, da igual si eres primeriza o repetidora, una de las sensaciones más agradables es la de preparar el nido.

Pensar, decidir, preparar y colocar todo lo necesario para recibir a tu bebé te hace sentir que estás más cerca del ansiado momento de tenerle en brazos. Pero en ocasiones, por diferentes motivos, esta preparación se hace un mundo: demasiada información, demasiados regalos, demasiadas donaciones, demasiadas ganas y normalmente, poca energía.

Si no sabes muy bien cómo organizar las cosas de tu bebé, dónde colocarlo de manera práctica, te doy unos tips que seguro que te ayudan a poner claridad a ese orden.

La ropa

Es más que probable, que ya incluso mucho antes del nacimiento de tu hijo o hija, tengas montones de ropa que has comprado, te han regalado o prestado. Sueles juntarte con un barullo de tallas, tipos diferentes de bodis, pijamas y prendas y posiblente incluso mezcla de ropa de diferentes temporadas…eso es una locura!!.

Tienes ropa de muy diversas tallas y estaciones: ropa para ahora y ropa para más adelante….

Lo primero que te recomiendo es que solamente prepares la ropa que vayas a usar en un plazo muy corto de tiempo: las tallas más pequeñas, las que coinciden con la temporada en que va a nacer tu bebé. En una cesta o caja puedes tener preparada la ropa que sigue en talla y temporada, para que puedas ir sacándola a medida que se vaya quedando pequeña la que uses, cosa que pasará con una velocidad asombrosa, te lo aseguro!!.

Una vez que tengas seleccionada la ropa que puede valerte para las primeras semanas, es conveniente que hagas una selección consciente de la cantidad de cada tipo de prenda que necesitarás. Sé, que si eres madre por primera vez, esta previsión es muy difícil de hacer: los bebés manchan mucha ropita, pero también es cierto que el número de lavadoras que empezarás a poner será bastante superior, así que no tengas miedo, nunca te quedarás corta.

Dónde y cómo colocar la ropita

Lo más práctico es que tengas a mano toda la ropita, accesible desde donde vayas a cambiar al bebé, de tal forma que puedas cogerla con una mano, sin soltar al niño con la otra. por eso un cambiador con cajones es ideal. Si no tienes esa opción, prepara con antelación lo que vayas a usar y así no tendrás que moverte de su lado.

Para que toda la ropita esté adecuadamente colocada, es muy útil doblar en vertical y guardar en cajones los bodis, calcetines, pijamas, chaquetas, camisetas, camisas y pantalones. Deja solamente en percha las prendas de abrigo, vestidos y petos. No olvides tener también en una cajita los accesorios como gorros y manoplas, o gorritas de verano.

Accesorios de cambio y aseo

Siempre es recomendable contar con un único lugar donde tener todo lo necesario para el cambio y aseo del bebé, por eso un cambiador (con o sin bañera) donde hacerlo cómodamente es muy práctico. En este lugar puedes separar diferentes secciones (preferiblemente en cestas, más accesible) con todo lo que vayas a usar:

• cambio de pañal (pañales, toallitas o esponja, toallita secante, crema de pañal).
• aseo (bastoncillos, pañuelos, gel, champú y toallas si tiene bañera incorporada, crema corporal, crema solar, peine, tijeras para uñas, suero).
• primeras curas para su ombligo.

Lo más probable es que tengas un montón de muestras de productos de aseo. Mi consejo es que las consumas cuanto antes para no tener montones de botecitos dando vueltas.

Y finalmente, si puedes, pon un espejo muy cerca del cambiador, a los niños les encanta mirarse y además, salen unas fotos preciosas 😉

Espero haberte ayudado.

Gracias por estar.

Sara